Dios puede darte mucho. Él no escatimó a su propio hijo. Solo Dios puede darte mucho más de lo que puedas pedir o pensar. Su palabra dice que Él no escatimó ni a su propio hijo sino que lo entregó todo por nosotros. «¿Qué podemos decir acerca de cosas tan maravillosas como estas? Si Dios está a favor de nosotros, ¿quién podrá ponerse en nuestra contra? Si Dios no se guardó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿no nos dará también todo lo demás? ¿Quién se atreve a acusarnos a nosotros, a quienes Dios ha elegido para sí? Nadie, porque Dios mismo nos puso…