La sobrestimación es la exageración de la estimación. Cuando estimamos a alguien creemos que es importante, valioso, único pero cuando lo sobreestimamos pensamos que esa persona es mejor que las demás.
Un estudio realizado en la Universidad de Ámsterdam, reveló que los padres que sobrevaloran a sus hijos y le hacen creer que son mejores que los demás están creando en ellos una personalidad narcisista.
En esa investigación seleccionaron 565 niños de los Países Bajos, entre los 7 y los 11 años de edad, que es la edad en la que comienzan a surgir los primeros rasgos de una personalidad narcisista.
Se les sometió a los niños a diferentes test en los que se evaluó su nivel de narcisismo, de igual manera también se entrevistó a los padres para determinar de que manera ellos se expresaban de sus hijos, los psicólogos les preguntaban si sus hijos conocían la historia del “Rey Alberto” o la fábula del “Benson el conejo” y aún no siendo historias reales, algunos padres afirmaban que sus hijos las conocían.
Luego se realizó una relación entre el nivel de narcisismo de los niños y los padres que sobrestiman sus capacidades y se llegó a la conclusión de que cuando los padres creen que sus hijos son mejores que los demás el ego infantil se eleva. Claramente, sobreestimar las capacidades de los niños y decirles continuamente que son muy especiales no es la única causa del narcisismo, también existe un factor genético y otras influencias extremas del medio ambiente.
Que dicen las encuestas sobre el desempeño escolar de los niños
Una encuesta que Learning Heroes publicó revela que nueve de cada diez padres en los Estados Unidos piensan que su hijo tiene un desempeño promedio o superior al promedio en matemáticas y lectura.
Pero el optimismo de los padres contrasta con los datos proporcionados por la National Assessment of Educational Progress, que muestran que sólo un tercio de los estudiantes son competentes en esas materias.
Otros estudios revelan lo siguiente:
- Nueve de cada 10 padres creen que su hijo tiene un desempeño promedio o superior al promedio en matemáticas y lectura, a pesar de los datos de NAEP que muestran que sólo uno de cada tres estudiantes de octavo grado son competentes en matemáticas y lectura.
- 77 por ciento de los padres creen que sus hijos están recibiendo una buena educación y 66 por ciento dicen que están por encima del promedio académico.
- 86 por ciento de los padres se basan en la boleta de calificaciones para saber si su hijo está consiguiendo buenas notas.
- Entre los padres hispanos, el número que cree que la escuela de su hijo proporciona una educación excelente o muy buena cae a dos tercios, y a cuatro de cada cinco les preocupa que su hijo vaya por buen camino.
- 72 por ciento de los padres sienten que es importante —y el 75 por ciento espera— que sus hijos obtengan un título universitario.
- Tres de cada cinco padres le dan mayor importancia a que sus hijos sean felices y padezcan poco estrés a que les vaya bien en la escuela.
¿Cómo construir una buena autoestima sin caer en sobrestimación?
En el caso de la crianza siempre nuestros hijos van a ser únicos, dotados de dones y talentos que como padres tenemos la capacitada de ver en ellos para guiarlos, instruirlos y motivarlos, fomentando una buena autoestima. En cambio, la sobrestimación es peligrosa. Cuando los niños son exageradamente confiados, autosuficientes y creídos se debe a la sobrestimación que están recibiendo.
La autoestima en un niño se forja afirmando su carácter, para que ellos sean niños y jóvenes seguros de si mismos, sin complejos ni miedos y al mismo tiempo enseñándoles el valor de otras personas, que se debe respetar el carácter y la individualidad de cada quien. Todos los niños son diferentes, y van a ritmos distintos, eso debemos entenderlo como padres, es lo primero, no caer en el error de comparar nuestros hijos ni con otros niños ni con sus propios hermanos.
Construir una buena autoestima comienza por ver las virtudes de tu hijo y recalcarlas pero también ayudándole en actividades las cuales no son sus fortalezas. Que ellos entiendan que todos tenemos diferentes capacidades y talentos, pero al descubrir en lo que somos realmente buenos podemos destacar con el fin de ayudar a otros, de eso se trata, que cada don sea usado para ayudar a alguien mas en vez de lucirlo egoistamente.
Concluimos lo siguiente
La sobrestimación es un error que muchas veces los padres comenten al sembrar en sus hijos el egoísmo, la competencia y el narcisismo. Soltemos ese mal, para que las futuras generaciones sean compasivas y bondadosas, el bien siempre vence sobre el mal. Sobre todo, pidamos a Dios sabiduría para educar y enseñar a nuestros hijos lo correcto, no seamos los promotores de la insana competencia, el odio, la envidia y amargura de los próximos adultos de esta sociedad.
Escrito por: Adalic de Rodriguez
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